Últimamente leo constantemente anuncios de personas, que ofrecen servicios correspondientes al campo profesional de la psicología, sin ser psicólogos.

Esta situación es preocupante. Una terapia inadecuada, no es inocua para  la salud.

Estos tratamientos, pueden causar daños a corto o largo plazo, a la persona que los recibe y su entorno.

Cada uno hace lo que quiere con su dinero

Sí. Esto es así, pero cuando está en juego la salud de las personas y ademas se comete un delito, las cosas se complican.

Un tratamiento psicológico, comprende una serie de metas.

Las metas se construyen, para solucionar la problemática que la persona presenta.

Estas metas nacen a partir de las hipótesis de trabajo.

Las hipótesis, son una serie de ideas preliminares, acerca de lo que puede estar causando los problemas del paciente.

Estas hipótesis, se generan a partir de la evaluación del psicólogo. Partiendo de un marco teórico, que le permite confirmarlas o rechazarlas y diseñar un tratamiento adecuado al caso.

Pero… ¿Que sucede si la persona que efectúa un tratamiento, no es un profesional?

El resultado puede variar dependiendo del caso, pero si una persona no tiene una formación determinada,  no existen garantías.

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Nota aclaratoria:

En el caso español, en la actualidad esta formación es de un total de 6 años, para poder ejercer como psicólogo en el ámbito de la psicología de la salud, y de 8 años si se opta a ser  especialista en psicología clínica.

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Sin garantías, no hay ética posible

Con que no existen garantías, me refiero a que el usuario no tiene idea alguna, de que esa persona, tenga los conocimientos necesarios para tratarlo.

Pero hay otro asunto añadido.

Al no tener una titulación oficial, no es posible inscribirse en un colegio profesional, luego no existe posibilidad de comprobar, que el profesional dispone de la titulación, que dice tener.

Como si se puede hacer, en el caso de un profesional colegiado. Puedes comprobarlo aquí para el caso de la comunidad valenciana.

Tampoco se puede denunciar una mala práctica.

Y esta, es una de las mayores problemáticas.

El código deontológico

Los profesionales de la psicología, disponemos de un código ético que se puede leer aquí.

En el caso de los falsos profesionales, no existe tal código, por lo que el código queda a su libre albedrío.

Es decir, ni lo puedes conocer antes de recibir sus servicios, ni lo puedes utilizar para hacer valer tus derechos.

¿Como detecto que estoy ante un caso de intrusismo?

Lo más sencillo es que introduzcas los datos del profesional en la web del Colegio Oficial de Psicólogos.

A continuación, te menciono algunos ejemplos de tipos de intrusismo, que yo mismo he visto, si te vienen a la mente más casos, puedes anotarlos en los comentarios.

• Los casos de éxito (terapéutico)
  

Esta es una forma frecuente de intrusismo, en el campo de la psicología.

Un caso de éxito, es una persona que tras superar una determinada problemática, afirma poder tratarla.

Esto es un problema, ya que no es lo mismo superar un problema, que tener las competencias para tratarlo.

A menudo estas personas, ofrecen sus servicios sin mencionar términos como : tratamiento o terapia, ya que así evitan vulnerar la ley.

• Los coach que no poseen titulación en psicología
  

Es importante destacar en este punto, que existen coach que sí que son psicólogos.

Pero tambien, existen una gran mayoría que no poseen dicha titulación.

Por lo que no pueden realizar las funciones propias de nuestra profesión. Dentro del  ámbito de la salud o en cualquier otro ámbito.

En el ámbito sanitario estas funciones son : la evaluación, el diagnóstico y el tratamiento sobre cualquier aspecto del comportamiento relacionado con la salud de la persona.

• Las personas que utilizan nombres creativos, para camuflar la ausencia de formación necesaria
  

Aquí entran todas las personas que utilizan nombres para designar su labor, que son inventados.

Suelen ser nombres que impresionan, ya que contienen términos grandilocuentes.

Es habitual que combinen prefijos y palabras que se encuentran dentro del ámbito científico, como Neuro- para dotarse de credibilidad.

También es frecuente  el uso de “Experto en….”, como un traje más, que aporta credibilidad, a la construcción de la profesión inventada.

• Las personas que utilizan todo tipo de pseudociencias, para tratar problemas psicológicos
  

Los psicólogos tenemos el deber de utilizar con nuestros pacientes, tratamientos basados en la evidencia científica.

Escogiendo de estos, el que mejor resultado este dando para la problemática que presenta el paciente.

El uso de pseudociencias, implica que no existe comprobación científica alguna, sobre estas prácticas.

Esto es un peligro para la salud de las personas.

• Las personas que son modelos de éxito en la vida

Que una persona tenga éxito (según siempre, su propio concepto del éxito) en la vida, no la faculta para diagnosticar, evaluar o tratar.

Para justificar su competencia como terapeutas, suelen argumentar cosas como “si yo lo he conseguido, tú también puedes “o “te enseñare los secretos de mi éxito”.

Es frecuente que diseñen todo un plan de marketing, que resalte su perfección y cantidad de logros alcanzados.

Para finalizar

Espero que te sirva de utilidad, este es un tema delicado. Siempre es difícil hablar de él.

Pero es un tema importante, que a menudo se banaliza.

Es clave que nos concienciemos que los tratamientos sobre la mente, al igual que sobre el cuerpo no son inocuos.

Igual que pueden solucionar un problema, pueden empeorarlo.

Si tienes alguna duda o comentario puedes escribirme abajo en los comentarios o por privado a info@albertoruano.es